Playoffs NBA 2025: Final de conferencia en el Este. Capítulo II

Fuente: totalprosports.com

La situación de los Knicks era desesperada tras caer en los dos primeros partidos y no sorprendía ver cambios en el quinteto titular visitante, Mitchell Robinson dejaba en el banquillo a Josh Hart y e resultado era que a ambos equipos les costaba anotar. El rebote ofensivo permitía a los neoyorquinos distanciarse en el marcador y Rick Carlisle necesitaba dar algunas instrucciones. Myles Turner se convería en el protagonista ofensivo del cuadro local y, como Indiana acertaba de fuera, los puntos de Jalen Brunson, y Mikal Bridges no impedían que los locales se pusiesen por delante en el marcador. Tom Thibodeau reaccionaba de inmediato pero, con TJ McConnell subiendo el ritmo del juego y las faltas personales agobiando a las estrellas de Nueva York, los Pacers se marchaban con una ligera renta a esperar el segundo cuarto. Ahora Karl-Anthony Towns debía sacar su mejor versión ofensiva porque, inesperadamente, Thibodeau ampliaba la rotación. No era suficiente, porque McConnell seguía haciendo unas posesiones locales muy cortas y la diferencia local se doblaba. El técnico visitante buscaba una reacción, pero Indiana seguía jugando con una gran agresividad siguiendo la estela de Aaron Nesmith. Los Knicks no metían de fuera y los balones perdidos comenzaban a ser un problema porque, pudiendo correr, Tyrese Haliburton comenzaba a brillar sobre la pista conectando con Obi Toppin. La diferencia llegaba a los veinte puntos y Thibodeau recomponía a los suyos antes de que Jalen Brunson sumase su cuarta falta personal. El ataque de los Knicks mejoraba y la diferencia se quedaba en trece puntos al descanso. Llegar en esa situación aliviaba a los visitantes pero, ver como Towns sumaba su cuarta falta personal, no les permitía relajarse en defensa. Los contactos subían de nivel, se acumulaban los fallos y, con cada error, los Pacers abrían un poco la distancia. Aaron Nesmith se iba a los vestuarios con un esguince de tobillo, el partido se volvía loco y Haliburton disfrutaba con ello. Carlisle erraba al querer poner orden en el partido, los árbitros esquivaban la quinta falta de Towns y decidían señalar tres faltas en ataque a los locales al tiempo que Nesmith volvía al banquillo local. Bastaba eso, y una buena racha de Miles McBride, para poner a Nueva York a diez puntos al afrontar los doce minutos finales. Ese recorte, de seis puntos, no parecía excesivo aunque, gracias a un Towns agresivo ofensivamente y acertado con los triples, conseguía reducir a la mitad la desventaja porque Indiana ya no podía correr y Pascal Siakam era lo único que funcionaba ofensivamente. Ni la quinta falta de su pivot estrella frenaba a los neoyorquinos que, con su mejor nivel defensivo, generaba dudas en el cuadro local. Las reticencias a tirar permitían a los Knicks llegar al último con dos puntos de ventaja y la posesión del balón. Nesmith fallaba un tiro con el defensor encima, Brunson forzaba su lanzamiento innecesariamente y, como Haliburton renunciaba a una bandeja sencilla, Myles Turner tenía un triple frontal para mandar en el marcador. El lanzamiento salía despedido y Josh Hart, con dos tiros libres, ponía a Nueva York cuatro puntos por encima con diecinueve segundos por delante. Haliburton y Brunson acertaban con sus tiros libres y los Knicks conseguían su primera victoria en la serie. Invitado inesperado: Miles McBride (Knicks)

Fuente: trashtalk.com

El duro golpe de dejar escapar el primer partido de la eliminatoria en su casa, dejaba cierta inquietud entre la afición de los Pacers pero, con los primeros minutos de su equipo, esas malas sensaciones se iban de su cabeza. Aunque los neoyorquinos se mostraban muy sólidos en ataque y defensa; los interiores locales dominaban, los triples de Indiana entraban y el ritmo del partido les pertenecía. Tom Thibodeau llamaba a reunión viendo que la diferencia se acercaba a los diez puntos y Nueva York repartía más su juego ofensivo y mejoraba su protección bajo los aros para aproximarse en el marcador. Jalen Brunson se dejaba llevar a un duelo de anotación con Tyrese Haliburton para evitar el distanciamiento local pero, como el partido volvía a acelerarse, Bennedict Mathurin y Pascal Siakam dejaban a Indiana con ocho puntos de ventaja cuando se cerraba el primer cuarto. Y el escolta local no se frenaba, los Knicks necesitaban más y Karl-Anthony Towns, junto a OG Anunoby, eran los protagonistas ofensivos del equipo neoyorquino. El partido se calmaba y el pivot dominicano insistía en castigar bajo el aro a la defensa local, Haliburton se multiplicaba para evitar el acercamiento visitante; aunque su cansancio era cada vez más evidente y en los Pacers veían con alivio como la energía de Aaron Nesmith les permitía mantener una corta renta a su favor. Una diferencia, de cinco puntos, que, sin querer, relajaba a Nueva York. Desde su mayor intensidad defensiva Indiana conseguía iniciar el cuarto con un parcial de siete a cero y el tiempo muerto neoyorquino era necesario. Los Knicks se mostraban más agresivo, su juego interior subía el nivel y el rebote ofensivo era suyo. En los locales necesitaban del mejor Haliburton, y su combinaciones con Myles Turner, para contestar la constante búsqueda del aro de los neoyorquinos . Jalen Brunson acumulaba tiros libres para poner el partido a siete puntos, y Towns anotaba, pero la diferencia se quedaba por encima de los diez puntos al encarar los doce minutos finales porque Mathurin volvía a salir del banquillo inspirado para alegría del Gainbrigde Fieldhouse. El problema visitante era que su banquillo tenía menos recursos y los Pacers, corriendo y con un inspirado Siakam, ponían la diferencia en quince puntos. Thibodeau paraba el partido, los árbitros tomaban decisiones discutibles que desesperaban a OG Anunoby y en Nueva York sus jugadores se cargaban de faltas personales. Sin embargo Indiana iba perdiendo energía en su juego y Mikal Bridges se aliaba con Anunoby para, con un parcial de diez a dos, poner el partido a seis puntos. Rick Carlisle precisaba dar órdenes, y un descanso, a sus jugadores. La agresividad volvía al cuadro local, Siakam seguía sumando y Nueva York ya no acertaba con el tiro exterior. Los Pacers llegaban al minuto final con siete puntos de ventaja; bastaba un triple de Obi Toppin, y una precipitación de Jalen Brunson, para poner el tres a uno para Indiana en la serie. Invitado inesperado: Bennedict Mathurin (Pacers)

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