CONFERENCIA ESTE

Toronto comenzó la eliminatoria provocando al rival, del “Fuck you Brooklyn” de su genial ejecutivo Masai Ujiri,  al tierno apelativo cariñoso de dinosaurios para desprestigiar al rival. Lo conseguido fue tener a un público caliente y a un rival plenamente concentrado para fastidiar la fiesta local. Llevó nueve minutos ver la magnitud del error cometido;  Joe Johnson desestabilizaba la defensa canadiense desde el poste bajo (llevando a Terrence Ross al banco por faltas tras cuatro minutos), la única respuesta era de la pareja interior local ante los nervios y dudas de los exteriores y la ventaja no paraba de crecer hasta llegar a los doce puntos. La situación estaba complicada y Kyle Lowry apareció al rescate, con su energía en defensa y un poco de acierto dejó a los de Casey a ocho puntos tras el primer cuarto. El segundo cuarto nacía con la tercera personal de Ross pero eso no era tanto problema como un DeRozan empeñado en chocar con la defensa rival en busca de su primera canasta. Por suerte los Nets se olvidaron de pisar la zona, Vasquez activó el ataque local y el desacierto en los triples visitantes provocó la llamada de atención de Jason Kidd con tres minutos jugados. Así al descanso se llegaba con cuatro pntos a favor para los de Brooklyn. En el tercer cuarto se mantenían las constantes del partido. Joe Johnson manejaba el reloj de los visitantes con la ayuda de Deron Williams y DeRozan se desesperaba. El único motivo de esperanza era la inmensa presencia de Valanciunas y un triple de Lowry sobre la bocina para dejar la diferencia a remontar en cinco puntos. Con la defensa apretando un poco más, y los suplentes pudiendo correr, el partido se encontraba empatado a mitad de último cuarto. Hasta De Rozan conseguía su primera canasta del partido. Naturalmente Kidd paró el partido, Paul Pierce se puso sus galones de dinosaurio y el uno a cero a favor de los visitantes se hizo real. Invitado inesperado: Shaun Livingston (Nets)

Agarrotados llegaron los canadienses al segundo partido, tres minutos pasaron hasta que llegó la primera canasta en juego tras un tiempo muerto de Casey. Lo bueno fue que esa canasta soltó al equipo y los exteriores finalizaban fácil cerca del aro rival. A mitad de cuarto se ponía por delante por primera vez, llegando al final del primer cuarto con dos puntos de ventaja. Cada vez Brooklyn mostraba más dificultades para anotar en la zona canadiense y las distancias crecían hasta los diez puntos. La energía de Garnett y los triples de Teletovic permitían a los Nets mantenerse a seis puntos al descanso. La experiencia de los chicos de negro afloró en el tercer cuarto. La defensa apretó metiendo manos y los Raptors bastante tenían con sobrevivir. Gracias a Amir Johnson y el rebote ofensivo el equipo local se veía a dos puntos con doce minutos por jugar. El último cuarto amaneció con graves problemas en el ataque visitante solventado gracias al rebote ofensivo. Enfrente los bases de Toronto rompían la zona con facilidad para anotar o repartir juego y eso les proporcionaba cuatro minutos de aire para los dos minutos finales. Pierce metió un tres más uno pero erró otros dos y el empate subía al marcador de la eliminatoria. Invitado inesperado: Greivis Vasquez, Pattrick Patterson, Amir Johnson (Raptors)

Durante unos minutos parecía que Indiana había vuelto. Se movía el balón en busca de los interiores y la defensa apretaba. Pronto todo cambió; Teague tomó el mando de los Hawks aprovechando los espacios en la zona que dejaban sus interiores y el rebote a los tiros exteriores que salían del reparto caían en las manos visitantes. Con el paso de los minutos el ataque local se atascaba en tres pases y tiros forzados de sus exteriores. La ventaja se iba a siete puntos a mitad de cuarto y Vogel llamaba a sus tropas. Poco consiguió con ello, los errores se repetían. Los visitantes cada vez se sentían más cómodos y sólo un triple de CJ Watson les llevaba a estar a seis puntos tras el primer cuarto. El segundo cuarto mostró la mejor versión de los Pacers con los suplentes en pista. El balón circulaba mejor y el juego individual de los exteriores cobraba más sentido al realizarlo cerca del aro. Tras cinco minutos los locales volvían a estar por delante y con dos minutos por jugar la ventaja se iba a los seis puntos. Para desesperación de Vogel se realizaron un par de malos ataques y Atlanta colocaba el empate en el marcador al descanso. Sin embargo todo puede ir a peor, en dos minutos de tercer cuarto Atlanta se alejaba ocho puntos al acertar con los triples y conseguir frenar los torpes intentos de Hibbert bajo el aro. Tras el tiempo muerto el juego de los Pacers volvió a fluir pero no conseguían frenar la movilidad de Paul Millsap. David West y Pero Antic se dijeron cuatro cosas a la cara y los nervios del americano le llevaron al banquillo con cuatro faltas a mitad de cuarto. Al mismo tiempo entró Evan Tuner por un tocado Paul George y tras minuto y medio se paró el partido. Teague y el desacierto de los locales ponían con once puntos de ventaja a los georgianos tras un parcial de siete a cero.La vuelta de George no solventaba los nervios crecientes en los locales, y pasaron cuatro minutos sin anotar hasta que la maldición se rompió con un triple a tabla de CJ Watson. De ahí a final de cuarto todo fue un tirar precipitadamente que permitía a los Hawks llegar al último cuarto con catorce puntos de ventaja sin hacer nada excepcional. Como quiera que la tendencia se mantenía en el último cuarto, la ventaja se elevó  a la veintena con seis minutos jugados de último cuarto. Fue la puntilla a Indiana que perdía el factor cancha, uno a cero para Atlanta. Invitado inesperado: DeMarre Carroll (Hawks)

El segundo partido se mostraba como a vida o muerte para los Pacers y los aficionados locales se temian lo peor. Sobre todo por el enfrentamiento previo al primer partido entre Stephenson y Turner. Tras un cuarto los miedos habían desaparecido, el equipo volvía a sus bases de juego interior y fuerte defensa. El único problema era que los Hawks también estaban a su nivel y un par de fallos de Hibbert colocaban en cuatro puntos la ventaja visitante quedando tres minutos por jugar. Por encima la segunda falta de David West a falta de dos minutos aumentaba la tensión en los locales y la diferencia cuando se cerraba el cuarto era de cinco puntos para Atlanta. Distancia que se dobló en cuatro minutos; el balón se compartía a mejor ritmo y los Pacers aportaban una única solución los lanzamientos a seis metros de Scola. Sin embargo la raza de Scola acabó por atraer a sus compañeros y en el descanso Indiana celebraba que estaban a cuatro puntos. En el tercer acto todo era agresividad por los locales y tras cuatro minutos estaban por delante en el marcador. Sin embargo todo fue a peor tras un tiempo muerto de Vogel faltando tres minutos y medio. Desde ese momento los Hawks no anotaron más, perdían balones cada vez que intentaban pisar la zona y precipitaban los tiros. El parcial de once a cero en esos minutos se completó con un triple sobre la bocina de Paul George. Catorce puntos que Atlanta ya no pudo superar en el último cuarto. La eliminatoria se iba a Georgia empatada. Invitado inesperado: Luis Scola, George Hill (Pacers)

En Chicago estaban muy felices esperando una fiesta pero tras seis minutos Nene daba muestras de que no sería sencillo. Las ventajas eran cortas en favor de los Wizards pero cuando llegaron a los seis puntos Thibodeau tocó el timbre para hablar con los suyos, quedaban tres minutos de cuarto. Por suerte Nene se sentó a descansar y los Bulls se situaron a dos puntos tras los doce minutos de inicio. Mientras Whittman hablaba para la TNT se veía en cancha a Nene con los suplentes, todo un desequilibrio que obligó a Thibodeau a responder metiendo a Noah tras dos minutos de juego. El problema para los visitantes era que cada vez Nene se veía más solo y, además, Gibson se ponía muy pesado y se llevaba los rebotes bajo el aro de Washington. Faltando dos minutos para el descanso era Whittman el que reclamaba la atención de su equipo, los Bulls estaban cinco arriba. La solución del banquillo visitante fue poner en cancha a Gooden para cerrar el rebote y eso frenó la energía de Gibson. Sin embargo supuso quitar a Nene con lo que el ataque estático se resentía, la diferencia quedaba en seis puntos para la segunda parte. Apenas se habían jugado dos minutos de segunda parte cuando Whittman apretaba el botón del pánico, la ventaja local alcanzaba los trece puntos. Dunleavy había despertado mientras los Wizards dormían. Los visitantes subieron un punto su agresividad y el partido se volvió loco. Cinco minutos más tarde Washington estaba a cinco puntos para cabreo de Thibodeau. Con la calma en el partido los Bulls contaban con tres puntos para defender en el último cuarto. La primera mitad del cuarto los Wizards se mantenían gracias a la experiencia de Andre Miller y Nene. En la segunda mitad los Bulls relizaron un par de malos ataques y los visitantes aprovecharon sus triangulaciones en ataque para tomar cuatro puntos de ventaja que no desperdiciarían. el primer punto era de Washington. Invitado inesperado: Andre Miller (Wizards)

Los Wizards salieron muy cómodos al segundo partido. La confianza de la victoria y su juego de equipo les permitía muchas formas de anotar. La ventaja crecía con cada fallo de Chicago hasta llegar a los nueve puntos a mitad de primer cuarto. Los nervios llegaron a los Bulls que precipitaron tiro y perdieron balones y lo pagaban viéndose diecisiete abajo con dos minutos por jugar. Por suerte Augustine presentó ocho puntos que permitieron a Chicago llegar al segundo cuarto a once puntos. El segundo cuarto mostraba que Augustine era la piedra en el zapato de la defensa visitante pero Miller compensaba sus debilidades defensivas anotando. Como la ventaja no se reducía los Bulls se dedicaron a repartir un poco para desesperación de los jovenes de los Wizards, con dos minutos por jugar la desventaja era de un punto. Al descanso tres fogonazos de John Wall volvían a dejar a siete puntos las esperanzas de los de Illinois. Tras el descanso los tiradores visitantes se apagaron y Nene no daba contenido la llegada de Chicago bajo la dirección de Augustine. El público se encendía con los cinco puntos de que dispondrían para el último cuarto. Con Augustine en estado de gracia la diferencia llegaba a la decena tras seis minutos pero los fallos acabaron llegando y la defensa de Washington apretaba más. Entonces el rebote ofensivo de Booker y los tiros de Beal resucitaron a los capitalinos que forzaban la prórroga. El atasco continuaba y Thibodeau paró el partido al verse cuatro puntos abajo. Tras nueve minutos los Bulls hacían su primera canasta en juego pero Nene había abierto bastante el hueco. Se lanzaron a por todas pero los fallos de Hinrich para empatar desde el tiro libre faltando dos segundos sentenciaron. Los Wizards volvían casa dominando la serie dos a cero. Invitado inesperado: Trevor Booker (Wizards)

Cinco minutos le llevó a Miami descubrir que ganar no iba a ser sencillo. Los Bobcats se pusieron cinco puntos por delante apoyados en un Al Jefferson imparable. El tiempo muerto de Spoelstra simplemente cerró el acceso al pivot pero no solucionaba los problemas en ataque. Fue la salida de Norris Cole y la aparición de los suplentes de Charlotte lo que permitió a los campeones en título estar a cuatro putnos al final del cuarto. Mientras sus compañeros mantenían a los Heat frenados al no poder correr Jefferson se miraba su físico en los vestuarios. Su vuelta era imprescindible porque cada vez Miami lograba más anotación en la zona y su presencia limitó los daños hasta que los de Florida comenzaron a correr. Un nueve a cero en minuto y medio obligó al tiempo muerto visitante. No sirvió de mucho y sólo un triple de Walker sobre la bocina dejaba la diferencia en siete puntos. Con el arranque de la segunda parte la defensa de los Bobcats volvió a los inicios de partido, nadie entraba en la zona y en dos minutos los visitantes mandaban en el marcador. Surgió entonces Wade para mantener a los locales en el partido hasta que faltaban tres minutos de cuarto por jugar. Entonces despertó Lebron y se le unió James Jones, a base de triples Miami tomaba siete puntos a su favor y amenazaba con romper el partido. En ciento cincuenta segundos Clifford paró el partido; la amenaza crecía, ya eran diez puntos a favor de los de Spoelstra. Era tarde, los Heat olían la sangre y Charlotte ya no anotaba. Faltando siete minutos en Florida estaban tranquilos, tenían quince puntos que es sirvieron para anotarse el primer punto de la eliminatoria. Invitado inesperado: James Jones (Heat)

En el segundo partido acercarse al aro era una temeridad y sólo los más fuertes aguantaban. Por eso no resulto extraño que Clifford quisiera tener una corta conferencia con sus chicos con nueve minutos jugados. Miami se iba dos canastas por delante mientras los Bobcats mostraban debilidades. Tras la conferencia el panorama no mejoró, la defensa local asfixiaba a Charlotte y Lebron se soltaba en ataque. Por encima Jefferson se iba a los vestuarios para desgracia visitante y la única  alegría fue un triple afortunado de Ridnour en la última posesión del cuarto que les dejaba a diez puntos. Con el nuevo cuarto recién iniciado Clifford tuvo que poner a un cojo Jefferson. La diferencia pasó de quince puntos a nueve en tres minutos. La actividad de Kidd-Gilchrist permiitía que los visitantes se colocasen a tres puntos pero la estrellas de Miami respondieron corriendo tras robo y la dieferrencia aumentaba otra vez. Con un par de triples en el último minuto los Bobcats dejaban las cosas como al inicio del cuarto. El cambio de campo atacante provocó la relajación en los Heat y Charlotte aprovechó para situarse a siete puntos al final del cuarto. Distancia que Miami dobló en cinco minutos de juego. Charlotte tenía problemas de anotación y un parcial ponía catorce arriba a los de Spoelstra, el partido parecía decidido. El orgullo de los Bobcats y el acierto de Walker lles llevó a tener una posesión para empatar con un triple faltando diez segundos. La defnesa local les mandó a la esqina y les robó el balón. Miami salía de casa con un tranquilizador dos a cero. Invitado inesperado: Norris Cole (Heat)